Botellón navideño

9 de diciembre de 2007:

Ayer salimos a tomar algo con un compañero de Marga del hospital por la zona del East Village. Es una de las zonas más animadas de la ciudad, fundamentalmente por la presencia de la universidad de Nueva York. Ya sabéis, universitarios equivale a bares, restaurantes, conciertos y desmadrados. Todo eso lo pudimos vivir ayer. Nada más llegar, nos fuimos paseando por las calles, conociendo sitios rusos, ucranianos y polacos, pues el colega, un tal Alexei, americano a pesar del nombre, se había pasado media vida por europa del este y le gustaban mucho estos sitios. Entre la gente, pudimos ver que había un montón de Santa Claus. En principio, pensamos que eran cosas de la navidad y de los comercios, pero pronto descubrimos el pastel. Resulta que habían quedado todos los estudiantes por la zona para irse de bares y botellón en la plaza Tompkin. Yo me moría de la risa de ver a todos estos disfrazados en los bares a cervezazos y bailes, con las respectivas mujeres de Santa Claus (minifaldas y botas incluidas) y los duendes. Mientras Marga y su amigo se quedaban en una cafetería pidiendo algo, yo no pude evitarlo y me dirigí a la plaza a echar unas fotos. Por si no me creías, aquí está la prueba. Como en el 2 de mayo, pero en plan navideño. Si no había mil tíos, no había ninguno. Y eso sin contar los que ya estaban en los bares.

Y eso que sólo eran las 4 de la tarde...No es de extrañar, por tanto, que viésemos por la noche la imagen decadente de un Santa Claus gordo, borracho como una cuba, tirado en un portal, con una elfa a su lado, cerveza en mano, y muerta de la risa. Enfin.

Al llegar a la cafetería, me di cuenta que era un restaurante marroquí, pero a lo Noeyorkino, esto es, como un restaurante normal con mesas en vez de alfombras, y música jazz como ambiente. Vaya mezcla. Igualito que en Melilla. La comida estaba muy buena, y nos tomamos unos tés morunos. Aquí se nos unió otra compañera de Marga de Barcelona, que nos acompañaría hasta la última aventura de la noche.

Luego, seguimos paseando, y nos fuimos a la zona del West Village, a seguir tomando cervezas. Nos metimos en un sitio bastante chulo, cutre como pocos, pero con una carta de cervezas que ya la quisiera mi padre. Nos tomamos unas Delirium Tremens, 9º, y probamos escocesas, irlandesas tostadas, y aromáticas con sabor a melocotón. El sitio, como los de Argüelles.

Después de una cena rica en calorías (hamburguesas, que bien ricas que están en este país) en un bar lleno de pantallas con deportes de todo tipo, nos fuimos a Chinatown, a un local en el que se celebraba una fiesta de carácter español, cuyo reclamo era la movida y los 80. Vale. El sitio, muy chulo en su parte superior, con barras, mesas, billares, buena música, tenía una entrada en plan caverna a una discoteca en el sótano, donde se celebraría el evento. Su nombre, Nacotheque. La música, de morirse de la risa. El ambiente, de lo más petardo. La movida más profunda, de la de Almodovar and company. Sólo después de un rato, empezó a sonar Alaska, Radio Futura, y demás. Mirad como promocionaban la fiesta.

Me pareció tremendamente raro estar allí. Por un momento pensé que estaba en Madrid, pero rodeado de americanos disfrazados de Tino Casal. La rayada fue tan grande, que no aguantamos mucho tiempo, y nos tuvimos que ir a las 2 de la mañana, al no servir ya las cervezas para mantenernos cuerdos. Y encima en Chinatown. Toda la situación era surealista. Una vez más. Me dió tiempo a grabar un video que no se ve nada, pero se oye más o menos.

P.D. Escribo esto después de escuchar el partido del Atleti ante el Getafe, por lo que espero excusen el estilo. Todavía me tiemblan las manos!!!!!!!!!!

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Escuchando la victoria del Atleti... resultará ahora que el gafe del atletico eras tu?

Por otro lado, de la narración se deduce que no solo salistes a "tomar" unas instantaneas del momento Papa Noel, yo diría más y apoyo la moción de que te uniste en elgún momento a un botellón fortuito

Norueego dijo...

No me uní al botellón, por que hacía un frío del carajo, y ya no tenemos 18 años para hacer botellones en esas condiciones...

conde-duque dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Mariconadas. Si hay que hacer botellón en la nieve, se hace.