8 de agosto de 2008:
La vida transcurre tranquilamente. Estas dos semanas han sido de lo más normalitas, sin actividades interesantes o dignas de mención. Seguimos disfrutando de las diversas oportunidades que ofrece el verano en NY, con sus actividades al aire libre, terracitas y barbacoas varias. Así que no nos quejamos ni una mica.
El jardín del MOMA está de lo más bonito, con los árboles a pleno verdor, y el agua corriendo por las fuentes. El murmullo de la gente descansando tras una larga visita, o simplemente leyendo y tomando el sol, hace del lugar un gran sitio para tomar un café y relajarse.
En este museo se expone actualmente una serie de maquetas de edificios de vanguardia bastante llamativos. Me llamó la atención que muchos de ellos están diseñados por estudios de arquitectura españoles, y que varios de estos edificios se encuentran o se se van a construir en territorio patrio. Al menos, la arquitectura funciona a nivel internacional!!!!! Los más curiosos, uno que se está construyendo en Sevilla, que parece como un centro de congresos y exposiciones, y uno, que no me acuerdo bien donde lo estaban haciendo, y que era espectacular. Resulta que van a cubrir su fachada con miles de lamparitas LED, que dependiendo de la radiación solar recibida iluminarán el edificio de un color u otro, por lo que cada día será, en principio y si funciona, de un color diferente.
A mi la que más me gustó, por aquello de la originalidad, era un cubo de metal, de unos 8 metros cúbicos en total (2x2x2, como yo, casi...) con todo lo necesario para vivir. Cama, salón, cocina, mesa, ordenador, baño, nevera, etc...Y todo eso en un espacio increíblemente reducido. Para que os hagáis una idea, fotitos al canto.
La electricidad, mediante paneles solares. Yo veía esto, y me acordaba de la ministra de vivienda y sus minipisos de 30 metros cuadrados, y a la que casi envían al paredón. Que sepáis que aquí los universitarios se van de casa, pues eso, a los 18, y que viven en casas mucho más pequeñas que esos 30m cuadrados. Además, parece que en Francia, la casa normal para gente joven es de alquiler y de unos 10 metros cuadrados, así que no protestemos tanto. Tenemos un gobierno que no nos merecemos...
Pero bueno, a lo que iba realmente. El miércoles me fui con unos amigos a ver al barça jugar contra el equipo local: Los New York Red Bull. Que no molaría llamarse el Atlético de Madrid Valium, por aquello de los antidepresivos...Llegamos de milagro, nos sentamos en el momento en que sacaban de centro y no nos dio tiempo a pedir birra. Tuvimos que esperar hasta el descanso, y se hizo algo largo. Como ya bien he expresado anteriormente, el partido fue como uno de solteros contra casados, o de niños contra hombres. La diferencia que había en el campo era tan brutal, que a los 10 minutos de empezar ya estaba aburrido. Y eso que a los 20 ya les habían metido 3 a estos americanos. Lo que más gracia me hizo fue ver a una cantidad considerable de gente en el campo (unas 30.000 personas, a ojo), nada que ver con el partido que vi entre US y Argentina hace un par de meses, y lo entregados que estaban a la causa culé. De verdad. La mayoría era sudamericanos, ataviados con camisetas oficiales, y gritando en varias ocasiones eso de ¡Barça! ¡Barça!. Y yo, pues flipando, claro. Como si estuviesen animando a su equipo del alma. Supongo que son cosas de la globalización, pero a mi se me hizo raro de cojones. Yo no iría por ahí gritando ¡Inter, Inter!, o algo así. Por cierto, la estrella era Henry. Les queda un mundo a estos por aprender.Yo hasta me dediqué a cantar los goles de los americanos (vaya portero tiene el Barcelona...) y así me entretuve un poco. La verdad es que al final lo pasamos muy bien. Sigo echando de menos el ambiente de España o Europa, pero bueno, todo llegará. Lo mejor de la tarde fue, una vez más, la compañía. Desde Margaret y su hermano Steve, con los que esperamos quedar este finde para ir a una playa de las de verdad, y que fueron los motores del viaje a Jersey, a los inigualables Phil y Beky, que no se pierden una. Era el primer partido de Beky, y me dio la sensación de que se aburrió un poco. Es normal, cuando vas a un campo y la gente adopta una actitud contemplativa, te aburres. Y si encima no se juegan nada, y la diferencia entre equipos es tan brutal, pues más todavía. Le prometí llevarla al Calderón en Madrid. Seguro que allí no se aburre...
Último homenaje a los culés:
El jardín del MOMA está de lo más bonito, con los árboles a pleno verdor, y el agua corriendo por las fuentes. El murmullo de la gente descansando tras una larga visita, o simplemente leyendo y tomando el sol, hace del lugar un gran sitio para tomar un café y relajarse.
En este museo se expone actualmente una serie de maquetas de edificios de vanguardia bastante llamativos. Me llamó la atención que muchos de ellos están diseñados por estudios de arquitectura españoles, y que varios de estos edificios se encuentran o se se van a construir en territorio patrio. Al menos, la arquitectura funciona a nivel internacional!!!!! Los más curiosos, uno que se está construyendo en Sevilla, que parece como un centro de congresos y exposiciones, y uno, que no me acuerdo bien donde lo estaban haciendo, y que era espectacular. Resulta que van a cubrir su fachada con miles de lamparitas LED, que dependiendo de la radiación solar recibida iluminarán el edificio de un color u otro, por lo que cada día será, en principio y si funciona, de un color diferente.
La parte B de la visita se desarrolló en los exteriores del museo. Es una exposición de casas prefabricadas o por módulos, y me pareció de lo más curiosa. Desde la casa de 4 pisos, con vistas increíbles, y hecha de plástico, cristal y acero, a una casa de madera, o una hecha con piezas intercambiables, a lo LEGO.
A mi la que más me gustó, por aquello de la originalidad, era un cubo de metal, de unos 8 metros cúbicos en total (2x2x2, como yo, casi...) con todo lo necesario para vivir. Cama, salón, cocina, mesa, ordenador, baño, nevera, etc...Y todo eso en un espacio increíblemente reducido. Para que os hagáis una idea, fotitos al canto.
Pero bueno, a lo que iba realmente. El miércoles me fui con unos amigos a ver al barça jugar contra el equipo local: Los New York Red Bull. Que no molaría llamarse el Atlético de Madrid Valium, por aquello de los antidepresivos...Llegamos de milagro, nos sentamos en el momento en que sacaban de centro y no nos dio tiempo a pedir birra. Tuvimos que esperar hasta el descanso, y se hizo algo largo. Como ya bien he expresado anteriormente, el partido fue como uno de solteros contra casados, o de niños contra hombres. La diferencia que había en el campo era tan brutal, que a los 10 minutos de empezar ya estaba aburrido. Y eso que a los 20 ya les habían metido 3 a estos americanos. Lo que más gracia me hizo fue ver a una cantidad considerable de gente en el campo (unas 30.000 personas, a ojo), nada que ver con el partido que vi entre US y Argentina hace un par de meses, y lo entregados que estaban a la causa culé. De verdad. La mayoría era sudamericanos, ataviados con camisetas oficiales, y gritando en varias ocasiones eso de ¡Barça! ¡Barça!. Y yo, pues flipando, claro. Como si estuviesen animando a su equipo del alma. Supongo que son cosas de la globalización, pero a mi se me hizo raro de cojones. Yo no iría por ahí gritando ¡Inter, Inter!, o algo así. Por cierto, la estrella era Henry. Les queda un mundo a estos por aprender.Yo hasta me dediqué a cantar los goles de los americanos (vaya portero tiene el Barcelona...) y así me entretuve un poco. La verdad es que al final lo pasamos muy bien. Sigo echando de menos el ambiente de España o Europa, pero bueno, todo llegará. Lo mejor de la tarde fue, una vez más, la compañía. Desde Margaret y su hermano Steve, con los que esperamos quedar este finde para ir a una playa de las de verdad, y que fueron los motores del viaje a Jersey, a los inigualables Phil y Beky, que no se pierden una. Era el primer partido de Beky, y me dio la sensación de que se aburrió un poco. Es normal, cuando vas a un campo y la gente adopta una actitud contemplativa, te aburres. Y si encima no se juegan nada, y la diferencia entre equipos es tan brutal, pues más todavía. Le prometí llevarla al Calderón en Madrid. Seguro que allí no se aburre...
Último homenaje a los culés:
1 comentario:
Pues bueno,
Los franceses alquilan habitaciones de 10 Metros... pero bueno, como no tenemos crisis...ahhhh que ahora si.
Hace calor por allí? Por aqui no mucho, asi que.. Ala haya paz, comprate un cubo de 2*2*2 y dime que tal se vive ;) con tu 1,90
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